Las organizaciones suelen contratar a las personas por lo que saben, pero muchas veces se van por lo que son.
Las organizaciones suelen contratar a las personas por lo que saben, pero muchas veces se van por lo que son. Por ello, THT, empresa experta en predecir el comportamiento humano, ha desarrollado Analyzer, una avanzada tecnología que analiza más de 200 características de un candidato, proporcionando una visión profunda y completa.
Para gestionar las diversas variables que se pueden presentar en los procesos de contratación de manera óptima, Analyzer emplea modelos predictivos que identifican correlaciones y patrones de comportamiento mediante herramientas como el análisis de regresión, redes neuronales y aprendizaje automático (machine learning).
Estas técnicas permiten establecer relaciones entre los rasgos personales y los datos sociodemográficos, creando algoritmos que se entrenan continuamente con nuevos datos. Cuanta más información se recopila, más precisas se vuelven las predicciones, lo que permite tomar decisiones mejor ajustadas a los requerimientos organizacionales.
Así funciona Analyzer
Este algoritmo, desarrollado por THT con tecnología de inteligencia artificial, es capaz de responder con una confiabilidad superior al 90% a preguntas clave que se plantea cualquier organización acerca de un candidato: ¿Quién es?, ¿En qué puesto se desempeñaría mejor?, ¿Cuáles son sus fortalezas y debilidades?, ¿Por qué debería contratarse?, ¿Cómo puede desarrollarse?, ¿Qué expectativas tiene?, ¿Cuánto tiempo podría permanecer en la organización?, ¿Qué preguntas se le deberían hacer en la entrevista?, ¿Qué persona entre varias sería la que se debería contratar?, entre otras.
A pesar de su precisión, es importante señalar que la tecnología no debe reemplazar el trabajo de los profesionales en psicología. La comprensión profunda de las emociones, la empatía y la interpretación de los matices humanos son competencias que solo ellos poseen.
Estas herramientas permiten a las empresas tomar decisiones más informadas y reducir el riesgo de contratar a personas que no se ajusten a la cultura organizacional o a los requisitos del puesto. Además, el uso de la inteligencia artificial debe ser ético y transparente, evitando sesgos y asegurando que el proceso de selección sea justo. Si bien la IA puede ser una herramienta poderosa, no es infalible y debe considerarse como un complemento, no un sustituto, del juicio humano.
Entre variables y contratación
Los procesos de selección son cada vez más complejos debido a la creciente cantidad de variables a considerar, todo dentro del cumplimiento de la Ley de Habeas Data. Los algoritmos no solo deben analizar rasgos psicológicos y factores sociodemográficos, sino también tener en cuenta las variaciones contextuales y emocionales inherentes a cada persona. La predicción, en este escenario, se centra en anticipar comportamientos y en comprender la probabilidad de que estos se manifiesten bajo determinadas condiciones, tanto individuales como ambientales.
El análisis se basa en información básica como edad, género, estado civil, experiencia, procedencia, habilidades, conocimientos, educación, aspiraciones salariales, datos autorizados de redes sociales, entrevistas y antecedentes. No obstante, lo más relevante es que también considera aspectos como el perfil comportamental y de personalidad, competencias, valores, motivaciones, liderazgo, capacidad en ventas, competencias digitales, propósito de vida, nivel de inglés, inteligencia racional y emocional, entre otros.
Ahora, esta IA es sin duda una gran alternativa que mejorará los procesos de selección y revolucionará la industria porque tiene un alto indicador de éxito y se puede ir mejorando de acuerdo con cada proceso e interacción que se tiene con Analyzer.
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